El bullet journaling se ha puesto de moda estos últimos años como una alternativa analógica a los métodos de organización digitales. Una tendencia que resulta ideal para aquellos amantes del orden y de hacer listas para afrontar su día a día.

Sin embargo, el bullet journaling no es para todo el mundo, por eso antes de animarte a emprender un proyecto de este tipo (que lo haremos) te vamos a explicar en qué consiste y qué debes tener en cuenta.

Seamos claros: qué es un bullet journal

Bullet journal es un concepto que se atribuye a un tipo de diario o agenda que tiene un sistema propio. Se considera todo un arte entre los profesionales de la organización. Es un sistema rápido y flexible que puede adaptarse a cualquier método. Se utiliza un cuaderno durante un periodo de tiempo determinado (1 año, 6 meses, 3 meses…) por la persona que lo esté realizando. 

Básicamente pretende ser un diario-registro de todo lo que queramos apuntar: tareas pendientes, completas, futuras… Pero también permite incluir listas de todo tipo: ejercicios de entrenamiento del día; lista de la compra; tareas urgentes; menú semanal; organización de un viaje; lista de películas pendientes; notas; un mood tracker (que recoge tu estado de ánimo diario), todo para que nos sirva para tomar conciencia y tener organizado todo lo que tenemos en la cabeza.

Todo tiene que estar bajo un sistema organizado por un índice y con una simbología adecuada con la intención de que de un vistazo podamos descifrar aquello que estamos expresando: ¿se trata de notas, reflexiones, recordatorios, citas importantes? 

¿Pero qué hay que tener en cuenta en el bullet journal?

El bullet journal depende completamente de ti. Del tiempo que le quieras dedicar, de cómo quieras decorarlo, de tu capacidad de organización...Pero sobre todo de una cosa: la constancia. Ser constante es la clave para terminar elaborando tu bullet journal con resultados.

Por ello es que requiere de compromiso y dedicación por tu parte. No se trata de una agenda. Son prácticamente hojas en blanco que serán lo que tú quieras que sean, pero que corren la mala suerte de no llegar a ser nada por pereza o por falta de tiempo.

¿Cuáles son los beneficios del bullet journaling?

Los resultados de este sistema son muchos, por ello te los vamos a exponer en una lista:

• Es un regalo para la creatividad. Te permite desarrollar todas las ideas que tienes en mente, combinar colores, ilustraciones, técnicas de lettering (dibujar letras). Si necesitas inspiración, en internet hay miles de ideas que pueden ayudarte.
• Ayuda a organizarte. Por motivos obvios,  te ayuda a planear tu semana, tu mes. También a establecer tus metas a corto, medio y largo plazo. Y llevar un control de tus tareas, de forma que no se te pase nada y gestiones mejor tu tiempo.
• Control de tus gastos. Puedes incluir un control de gastos en tu bujo que te ayude a tomar conciencia de aquello en lo que inviertes tu dinero.
• Tomas conciencia sobre lo que te preocupa. Es simultáneamente un ejercicio de introspección constante. Apuntas tus inquietudes, reflexiones… Es como la versión analógica de Twitter.
• Inviertes tiempo en ti. El bullet journaling requiere que te dediques un mínimo de 5 minutos y un máximo infinito de tiempo al día a centrarte en ti y en tus intereses. Es sin duda un espacio precioso para olvidarte del resto y hacer algo que te gusta.

Te animamos a que el próximo curso empieces tu Bullet Journal. Puede ser una forma estupenda de saber que llevas tu estudio al día, tu trabajo como deberías… Y también te sirve para reposar tus ideas. 

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