Cinco frases que pueden arruinar tu entrevista de trabajo
Cuando las empresas buscan candidatos recurren a las entrevistas personales para conocer mejor a los aspirantes antes de tomar una decisión. Y cualquier mínimo error puede marcar la diferencia entre conseguir el puesto de trabajo o ser rechazado.
La mayoría de trabajadores han tenido que hacer a lo largo de su vida varias entrevistas de trabajo. Un proceso en el que los nervios, la inseguridad y las dudas toman el protagonismo. Tanto es así que en ocasiones contar con el mejor currículo y experiencia no garantiza la obtención del empleo. Más allá de la formación y experiencia previa, los responsables de la contratación recurren a las entrevistas personales para conocer más sobre los aspirantes.
Aquí entran en juego muchas cosas: actitud del entrevistado, sus respuestas ante preguntas clave, capacidad de comunicar… Y, al igual que en otras ocasiones hemos ofrecido consejos a tener en cuenta sobre estos procesos de selección, también hay situaciones a evitar. Esta vez, en concreto, nos referimos a cinco frases que nunca deberías decir durante una entrevista:
- Afirmar que no tienes la suficiente experiencia: intenta no descalificarte, ya que este tipo de frases suelen quedar en la mente del entrevistador. En vez de hablar de tus debilidades, céntrate en tus fortalezas y en poner en valor las cosas por las que estás preparado para conseguir el puesto.
- Decir que no eres el más cualificado: afirmar este tipo de cosas no te hará parecer más humilde, sino peor preparado que el resto de aspirantes al puesto de trabajo. Si te han llamado para hacer la entrevista es porque cuentas con la formación necesaria para el puesto
- Preguntar por las funciones de la empresa: siempre que acudas a una entrevista debes informarte sobre la empresa para la que postulas previamente. Llegar a la entrevista para preguntar a qué se dedica está muy mal visto y parecerá que no tienes interés real en el puesto.
- No reconocer tus logros individuales: no utilices continuamente el ‘nosotros’ para hablar sobre tus proyectos e iniciativas anteriores. Sí, muchas las habrás logrado trabajando en equipo, pero procura poner en valor tu aportación individual.
- Divagar con tus respuestas: al divagar es posible que transmitas cierta inseguridad, lo cual puede ser mal visto por parte del entrevistador. Además, al no ser directo y conciso, corres el riesgo de perder la atención de quien te está realizando la entrevista.