Es bastante habitual que a los más pequeños de la casa les cueste concentrarse a la hora de hacer los deberes o estudiar. Pero, aunque pueda parecer misión imposible, existen ciertos métodos para mejorar su rendimiento, además de armarse de paciencia.

No siempre pasa, aunque sí que es bastante común: el momento de que los niños y niñas pequeñas tienen que ponerse a estudiar o hacer deberes suele ser complicado. Y es que, por norma general, son actividades que no resultan demasiado agradables para los más pequeños de la casa. Hasta el punto de que las distracciones toman el protagonismo.

Si alguna vez has tenido que hacer frente contra este problema, tenemos una solución para que puedas fomentar la capacidad de concentración en los peques. Seguirá siendo una actividad que no les encante, pero podrán desarrollarla mejor y servirá como una gran base para el futuro, además de aumentar significativamente el rendimiento obtenido.

¿Cómo mejorar la concentración en los niños?

Método Guillour

Básicamente consiste en copiar una serie de dibujos mirando una imagen a través de un espejo. Puede parecer bastante simple, pero con este método se trabaja la concentración y el desarrollo a otros niveles. Es una actividad perfecta para estimular los hemisferios celebrarles, mejorar la simetría y la inteligencia espacial.

Juegos de concentración

Existen muchos juegos para fomentar y hacer crecer su capacidad de concentración, que no todo van a ser deberes. Los puzzles suelen ser una gran opción para conseguir esto, así como pintar mandalas o juegos que les hagan pensar. De este modo, conseguirán ejercitar su concentración mientras se divierten.

Crear hábitos

Evidentemente será mucho más fácil conseguir que se concentren si tienen el hábito de hacerlo. EN este sentido, lo mejor es generar una rutina de estudio desde edades muy tempranas, lo que hará que todo sea más sencillo. Cada día deberán dedicar una franja de su tiempo a actividades formativas, de modo que lo tomarán como un hábito y les será más fácil hacerlo.

Descanso

Otro aspecto importante está relacionado con los descansos, sobre todo en niños y niñas pequeños. Ten en cuenta que todavía no están acostumbrados a estudiar o hacer estas actividades durante mucho tiempo. Por ello, su rendimiento disminuirá tras una hora intensa de trabajo. Para que esto no suceda podéis hacer pequeñas paradas periódicas para descansar un poco.

Silencio

El silencio es fundamental para poder mantener unos niveles adecuados de concentración. Por este motivo, cuando tengan que realizar actividades relacionadas con su formación, lo adecuado es que no haya muchos ruidos en la casa. Será más sencillo si cuentan con un espacio propio en el que estudiar.