Formación IDEAL

Estudiar a largo plazo: claves para una buena planificación

Alberto Flores

En muchos casos, ya sean unas oposiciones, un máster o una determinada carrera de la universidad, es necesario trabajar a largo plazo. Porque no, no siempre vale con estudiar solo las semanas previas a la prueba. Y ahí es cuando contar con un plan de estudio marca la diferencia.

Para estudiar y hacer frente a un examen es clave estar bien preparado. Sobre todo si se trata de una prueba con mucha materia o que requiere de una preparación de varios meses o incluso más. Es el caso de muchas oposiciones y algunos exámenes importantes de las carreras, además de másteres y otros tipos de formación similares. Y para afrontar todos estos casos con éxito, hay algo que resulta imprescindible: contar con un plan de trabajo a largo plazo.

Adaptar el plan a tus necesidades

El primer punto que debemos aclarar si necesitamos una planificación a largo plazo pasa por saber el tiempo que requerirá la tarea o prueba que queramos completar. Y aquí hay que encontrar un equilibrio entre el tiempo que necesitamos para prepararla y el tiempo disponible para ello.

  • Tiempo necesario: debemos establecer, aunque sea de forma aproximada, el tiempo que tendremos que estudiar. Aquí es clave conocer cuánto falta para el examen, lo que marcará el tiempo que necesitamos dedicar cada día para llegar preparados a la cita.
  • Tiempo disponible: también es importante saber el número de horas que podremos dedicar al día para alcanzar nuestras metas. Aquí tenemos que ser realistas, no vale de nada planificar que estudiaremos 8 horas al día si luego no dedicaremos más de cuatro.

Claves para elaborar tu plan de estudio

Calendario

Es bastante recomendable que nos hagamos con una agenda para marcar todo lo que tenga que ver con nuestra preparación, ya que será de varios meses. Esto nos permitirá conocer de un vistazo qué temas estudiar en cada sesión o cuánto falta para el examen.

Horario

No siempre será posible, pero lo ideal sería poder estudiar cada día en un mismo horario. De este modo, conseguiremos habituarnos y nos costará menos trabajo rendir al máximo en las sesiones de estudio. Por otra parte, es mejor cumplir con nuestro horario cada día, aunque suponga un gran esfuerzo, que luego intentar recuperar a base de atracones de estudio, ya que suele ser contraproducente.

Objetivos

En toda preparación establecer metas resulta muy importante, así que deberíamos añadirlas a nuestro plan de estudio. Lo idóneo pasa por establecer objetivos diarios, que puede ser estudiar un determinado número de temas. Hecho esto, también puedes marcar objetivos semanales, que te ayudarán a medir tu progreso. Además, si los cumples conseguirás una gran satisfacción, lo que será un empujón perfecto para continuar estudiando.