Ser opositor está de moda. Las dificultades para encontrar un puesto de trabajo estable y con buenas condiciones hacen que cada día sean más las personas que optan por este camino. Pero… ¿Están haciéndolo correctamente?

Durante los últimos años el número de postulantes en las oposiciones ha crecido de manera exponencial. Cada vez más personas, independientemente de su formación o vocación, se deciden por seguir este complicado camino debido al premio final: un trabajo para toda la vida con buenas condiciones laborales y económicas. La verdad es que la meta es bastante apetecible, sin embargo no todo el mundo encara este proceso de una manera adecuada.

Ya sea porque se ha perdido la rutina de estudio tras varios años sin hacerlo o porque no saben por donde empezar, un elevado porcentaje de opositores no consigue su objetivo por no prepararse como es adecuado. Y para que esto no sea un problema para ti, hemos recopilado tres rutinas exitosas a seguir para que todo el proceso sea algo más sencillo. Presta atención porque durante la preparación de una oposición todo cuenta, hasta lo que comes.

La planificación, el punto más importante

Lo más importante de todo el proceso es contar con una planificación a medida. Gracias a ella podremos saber lo que estudiar cada día para llegar preparados a la fecha del examen, así como establecer unos horarios de estudio. Para una correcta planificación debemos conocer todo sobre la convocatoria. A partir de ahí, debemos buscar un lugar óptimo para el estudio y planificar cada una de las sesiones a realizar.

Todo es importante, desde el tiempo de estudio hasta el que dejemos para descansar. Planifica tus horarios en función al resto de actividades que debas realizar cada día y se realista con ellos y si puedes cumplirlos o no. En ocasiones resulta positivo establecer objetivos semanales ya que llegar a ellos supondrá un empujón extra de motivación para continuar con el trabajo.

El estudio no es solo hincar codos

Estudiar muchas horas seguidas únicamente leyendo el temario no te llevará a aprobar tu oposición. Para conseguirlo necesitarás contar con diferentes técnicas de estudio que te ayuden durante el proceso. Es recomendable comenzar con una lectura del temario que tengamos que trabajar para después comenzar a realizar resúmenes y esquemas. Otras técnicas como el subrayado de colores también son aconsejables.

Si no sabes qué hacer o no das con la tecla del éxito, puedes recurrir a la ayuda de academias especializadas en oposiciones. En estos lugares te facilitarán todo el temario con el que tendrás que trabajar durante los próximos meses y años, además de ofrecerte un plan personalizado que se adapte a tus necesidades.

Nutrición y descanso

Muchas veces se comete el error de, ante el agobio por la falta de tiempo, reducir el tiempo de descanso a cero. El tiempo de relajación es imprescindible y nos permitirá rendir más en las futuras sesiones de estudio. De este modo lucharemos contra el agobio y estaremos frescos para trabajar cada día, algo que, en caso contrario, nos costaría mucho y nos llevaría a sesiones nada productivas. Otro aspecto importante tiene que ver con la alimentación, que jugará un papel clave para contar con la energía necesaria para estudiar y que nos ayudará a mantener la concentración.