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Cómo mejorar las puntuaciones de las pruebas físicas de las oposiciones

Cómo mejorar las puntuaciones de las pruebas físicas de las oposiciones
Alberto Flores

Existen una gran cantidad de oposiciones que, además de exámenes teóricos sobre su temario, tienen entre sus pruebas diferentes ejercicios físicos. Y lo cierto es que si no se preparan correctamente será casi imposible conseguir una plaza en la oposición. Te contamos cómo mejorar tus resultados en ellas.

A la hora de preparar una oposición todos los detalles cuentan. Desde disponer de un temario completo hasta contar con una planificación y organización que nos permita aprovechar al máximo nuestro tiempo. En la mayoría de oposiciones con tener controlado el temario suele bastar. Sin embargo, existen muchas otras que además de incluir estos exámenes teóricos también cuentan con pruebas físicas.

Oposiciones como las de Policía Nacional, Local, Bombero, Agente Forestal o Guardia Civil, entre otras. Unas pruebas que se componen de diferentes ejercicios físicos de carácter eliminatorio, lo que hace fundamental contar con una buena preparación para poder superarlas. Sin embargo, en muchos casos la mejoría en estos ejercicios puede tardar en apreciarse y llegar a desesperar incluso a los más pacientes. Así que para que esto no os suceda, os vamos a ofrecer algunos consejos para la preparación de las diferentes pruebas físicas de las oposiciones.

¿Cómo son las pruebas físicas de las oposiciones?

Lo primero que debemos tener claro es que cada oposición cuenta con unas pruebas físicas diferentes. Por este motivo y para poder ajustar nuestro entrenamiento a ellas, es imprescindible que conozcamos exactamente cómo son a las que tendremos que enfrentarnos. Estas pruebas suelen ser carreras de resistencia, pruebas de velocidad, natación, ejercicios de agilidad, salto vertical, dominadas… Si quieres conocer al detalle cómo son las pruebas de tu oposición, echa un vistazo a las bases de la convocatoria.

Consejos para iniciar la preparación

Poco a poco

Debes tener claro que esto no es como estudiar. No puedes llegar el primer día y pasarte 8 horas entrenando. Ni tampoco hacerlo cada día o correrás el riesgo de sufrir lesiones. Debes comenzar poco a poco e ir aumentando el nivel de exigencia y ritmo de manera paulatina. Planifica el entrenamiento solo con unas pocas sesiones a la semana y cuando tu condición física mejore, aumenta.

Todas las pruebas

Habrá pruebas que se te den mejor que otras, como les sucede a todos los opositores. Sin embargo, no debes caer en el error de únicamente trabajar las que se te den peor. Es obvio que a esas deberás dedicarles más tiempo pero debes trabajar todas las pruebas.

Alimentación equilibrada

La alimentación juega un papel clave para tu rendimiento físico. Por ello es importante llevar una dieta rica y equilibrada, además de no ingerir alimentos demasiado pesados antes de una sesión de trabajo. Con una buena alimentación mejorarás de manera más rápida.

Esfuerzo constante

Puede que tardes en mejorar tus resultados pero, al igual que sucede con el estudio, no pierdas la perspectiva. Preparar una oposición es como una carrera de fondo, requiere tiempo y mucho esfuerzo. Pero con paciencia todo llegará, así que no tires la toalla y poco a poco irás aumentando tu nivel.

Descanso

En muchas ocasiones hemos hablado de lo importante que resulta el descanso en las oposiciones para no saturarnos. Con las pruebas físicas sucede igual, ya que nuestros músculos también necesitan descanso y días de recuperación. Si entrenas todos los días puedes sufrir de fatiga muscular, sobrecargas e incluso lesiones de mayor índole. Así que no caigas en el error de planificar una carga que tu cuerpo no puede asumir y añade días de descanso.

¿Cómo mejorar los resultados?

Ya sabes como debes encarar la preparación de las pruebas físicas de tu oposición. Sin embargo, es posible que solo con estos consejos no experimentes la evolución que esperabas. Si eso sucede, no debes preocuparte. Esa mejoría no llegará por arte de magia, sino con esfuerzo, constancia y mucha paciencia ya que se trata de un proceso largo. Por otra parte, si consideras que no estás mejorando lo suficiente, siempre puedes recurrir a un preparador físico para que te de ese empujón que tanto necesitas.

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