Tanto las empresas privadas como una gran cantidad de oposiciones cuentan con una serie de test en sus procesos de selección. Unos de los que más quebraderos de cabeza suelen generar son los psicotécnicos, que están ideados para medir las capacidades de los candidatos. Explicamos en qué consisten y las claves para poder superarlos.
Lo más normal es que a lo largo de nuestra vida tengamos que hacer frente a diferentes entrevistas. Desde para entrar en un determinado centro de formación, hasta las que permiten acceder a un puesto de trabajo. De hecho, en algunas oposiciones como las de Guardia Civil o Policía Nacional son un fijo en cada una de sus convocatorias. Sin embargo, si hablamos de pruebas psicotécnicas, la mayoría de personas no están acostumbradas a tener que hacer frente a una prueba de este tipo. Y, en muchas ocasiones, estos test se convierten en el principal obstáculo para conseguir el trabajo deseado.
Antes de continuar con las claves que deberíamos tener en cuenta para que la prueba psicotécnica no se convierta en una pesadilla, debemos explicar en qué consiste exactamente. Estas pruebas no suelen tener una temática concreta, sino que se tratan de diferentes preguntas que sirven para valorar ciertos aspectos como la atención, la memoria o la inteligencia en general. Pero no lo hacen a través de preguntas que requieran de conocimientos, ya que son eminentemente prácticas y lo que requieren es de comprensión.
De este modo, no se trata de una prueba que sirva para comprobar nuestros conocimientos, ni tampoco es un test que pueda medir nuestra personalidad. Simplemente se trata de una serie de pruebas que medirán nuestras capacidades a nivel de lógica y forma de actuar. En este sentido, al ser algo práctico, mucha gente decide no prepararse. Sin embargo, para superarlos con éxito realizar varias pruebas y estar familiarizado con estos test puede ser de gran ayuda.
El primer punto que debemos tener claro es que aquí la tranquilidad resulta clave. A diferencia de una prueba de conocimientos, en la que tendríamos que demostrar todo lo que hemos estudiado, aquí no hace falta una preparación tan concienzuda. Pero si que es importante acudir a la prueba lo más relajado y tranquilo posible para poder dar el máximo rendimiento.
Al igual que debemos evitar los nervios, también es aconsejable no tener mucha prisa a la hora de contestar las preguntas. Esto no quiere decir que vayamos lento, sino que nos tomemos el tiempo que necesitemos para elegir nuestra respuesta. El tiempo que nos ofrecen para estos test suele ser más que suficiente, así que procura leer todo y no cometer errores.
Como hemos comentado antes, la práctica es imprescindible para que la prueba no nos pille por sorpresa. Saber a qué nos enfrentamos es una gran ventaja y existen muchísimas páginas e internet y modelos de cuestionarios con pruebas piscotécnicas. Así que no lo dudes y prepáralo como si de cualquier otro examen o prueba se tratase.
En muchas ocasiones se comete el error de querer contestar a todas las preguntas, aunque no tengamos del todo claro cuál es la respuesta. Si no sabes qué respuesta elegir, nuestra recomendación es que dejes esa pregunta en blanco y una vez completes la prueba vuelvas a ella si te sobra tiempo.